Parado fuera de su colegio
su primer día de clases
con sus zapatitos relucientes
con su peinado relamido
con un esbozo de sonrisa
con sus padres separados
escucha años después
su propio llanto contenido
en la boca del sobrino...
una queja en el nombre de toda la injusticia familiar
Massimo Ranieri
Hace 2 años
1 comentario:
Yo tambien lo veo...
y huyo de todo aquello que lo recuerda.
dame esos cinco!!
yo
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